Carrito de tortas fritas en Solís de Mataojo-Lavalleja-Uruguay 7/02/2014
Fotografía: Sebastián Faraldo Salnikov
La pregunta es: ¿cuál es la historia detrás de esta fotografía que muestra a dos mujeres vendiendo tortas fritas?
Fuertes lluvias y tormentas azotaron nuestro país este verano del 2014. Solís de Mataojo, un pueblo ubicado a 80 km de Montevideo, en el departamento de Lavalleja, no se salvó de las inclemencias del tiempo.
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Calles y puentes tapados por el agua, arroyos desbordados y sobre todo personas sin poder salir de sus hogares para disfrutar del verano. Por suerte y a diferencia de varios puntos del país, no ha sido necesario evacuar a nadie.
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- Puente sobre arroyo Mataojo
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- Vecinos se arriman al arroyo Mataojo desbordado
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- Parque del arroyo Mataojo inundado
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- Punte sobre la vieja ruta 8 (Arroyo Solís)
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- Arroyo Solís
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- Arroyo Solís
¿Y qué hacemos los uruguayos cuando llueve? Por supuesto, comemos tortas fritas. La venta de tortas fritas ha incrementado notoriamente en estos días de febrero y los vendedores han logrado ponerle al mal tiempo, tortas fritas.
Especialmente el «Carrito de Raquel», el que se mudó a Sarandí, esq. Av. Fabini. a principios de Febrero y logró más ventas que nunca.
Raquel, la señora que aparece de gorrito blanco y blusa negra y blanca a rayas, comenzó su negocio de tortas fritas el verano pasado frente al policlínico de CAMDEL. Pero su espacio de trabajo estaba lejos de ser lo que es hoy en día. Con una mesita, una ollita, una garrafa, y unos toldos para cubrirse del viento y la lluvia, Raquel vendía tortas fritas a $10 (a diferencia de la competencia, también informal, que vendía dicho producto a $12) en una esquina sobre la vereda. Las condiciones en las que trabajaba no eran las más adecuadas y no cumplía totalmente con los requisitos municipales de contralor sanitario.
Esto motivó la molestia de sus competidores, quienes primero le advirtieron y luego la denunciaron ante las autoridades municipales, lo que deja en claro que ellos también descubrieron su informalidad.
Obligada a retirarse del lugar, Raquel no quiso rendirse. Sacó un préstamo y consiguió un carrito, acudió a las autoridades y dicidió iniciar los tramites para formalizar su negocio.
Hoy en día, trabajando en un espacio adecuado, habilitado por la Intendencia, ha aumentado sus servicios con la venta de hamburguesas, panchos y bebidas, contando con heladera con freezer, cocina, extractor de aire, pileta, agua potable y luz eléctrica.
Esta historia pone en claro la lucha contra la adversidad de quien quiere gestionar una pequeña empresa personal sin el asistencialismo del Estado. Ejemplo para quienes en otra situación económica actúan al contrario.
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- Carrito
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- Precios
«Debido a la lluvia he vendido más tortas fritas» Raquel Fontes
Raquel manifestó que aquel clima que en el pasado atentó en su contra, hoy aún siendo más severo, favoreció su emprendimiento.
Si bien aumentaron sus ventas por las inclemencias climáticas, su actitud de precios módicos, colaboró con los damnificados en el acceso a los alimentos, a diferencia de sus competidores.
Así que ya les digo, si están de paso por Solís, tengan cuidado al cruzar el puente sobre la ruta 8 y les recomiendo que prueben las tortas fritas del «Carrito de Raquel» ubicado en Sarandí, esq. Av. Fabini. Hasta la próxima historia detrás de la foto.
Yo comiendo una torta frita
PRECIOS:
Hambuguesas: Simple $35 Completa $50 Súper $65
Tortas fritas: Común $10 Con azúcar $12 Con dulce de leche $15
Panchos: Común $20 Completo: $25 Con panceta, jamón y muzzarella $35
Coca cola $20
Papas fritas con mayonesa y ketchup $20
Historia detrás de la foto 